Pandillero de Long Island culpable de 2 asesinatos a batazos y machetazos

Pandillero de Long Island culpable de 2 asesinatos a batazos y machetazos
Jonathan Hernández, miembro de la Mara Salvatrucha (MS-13) puede ser sentenciado a cadena perpetua en prisión. (Foto: EFE)

El pandillero de 24 años, Jonathan Hernández, miembro de los «Sailors Locos Salvatruchas Westside», una camarilla de la organización criminal transnacional Mara Salvatrucha (MS-13), se declaró culpable de dos brutales asesinatos ocurridos en Long Island en el 2016.

Hernández (también conocido como “Travieso” y “Kraken”), domiciliado en el pueblo de Brentwood, del condado neoyorquino de Suffolk, está acusado de cargos de extorsión en relación con su participación en la muerte de Michael Johnson, el 28 de enero, y de Oscar Acosta, el 29 de abril.

Además, el «marero» aceptó su culpabilidad en un intento de asesinato ocurrido el 10 de agosto de 2016 y una conspiración para distribuir cocaína y marihuana. El procedimiento judicial se llevó a cabo recientemente en una corte federal en Central Islip, ante la Jueza Magistrada de Estados Unidos, Anne Y. Shields.

 

Salvajismo en Brentwood

 

Según documentos judiciales y declaraciones del acusado, el 28 de enero de 2016, un líder de la camarilla de los «Sailors» y otros miembros y asociados de la MS-13 estuvieron presentes en Jocorena Deli, en Brentwood, donde vieron a Michael Johnson, de 29 años, y afirmaron reconocerlo como integrante de la pandilla callejera rival, los «Bloods».

En ese momento, Johnson fue marcado como su «alimento», lo que significa que lo iban a matar. Después de recibir la aprobación requerida del líder de esta pandilla en Nueva York, se contactó a Hernández y otros miembros de la MS-13 para cometer el asesinato de Johnson. Se les ordenó traer armas, incluido un machete y un bate de béisbol a una zona boscosa cerca de la Segunda Avenida, en Brentwood.

Entonces, Johnson fue atraído al lugar aislado donde los pandilleros, incluido Hernández, le golpearon salvajemente a «batazos» de béisbol, lo apuñalaron con un cuchillo y se turnaron para cortarlo con un machete. El cuerpo inerte de Johnson fue recuperado por el SCPD el 2 de febrero de 2016.

Y a principios de 2016, el acusado Hernández y sus compinches de los «Sailors» decidieron asesinar a Oscar Acosta, de 19 años, porque sospechaban que se asociaba con la pandilla rival «Calle 18». Así el 29 de abril, varios pandilleros de la MS-13 encontraron a Acosta en un área boscosa cerca de una escuela primaria en Brentwood, donde había sido atraído con el pretexto de fumar marihuana.

Los «mareros» golpearon a Acosta dejándolo inconsciente. Luego ataron sus manos y pies, le colocaron una ropa en la boca para evitar que hiciera ruido y convocaron a otros pandilleros, incluido Hernández. Después cargaron a Acosta en la cajuela de un automóvil rumbo a una zona más apartada en Brentwood, cerca de un hospital psiquiátrico abandonado.

Sacaron del auto a Acosta (que aún estaba vivo) y lo llevaron al bosque donde todos se turnaron para matarlo violentamente a machetazos. Tras este horrendo crimen los «salvatruchas» enterraron el cuerpo de Acosta en una tumba poco profunda. Su cuerpo fue descubierto por la policía de Suffolk el 16 de septiembre de 2016.

 

A cadena perpetua

 

«Al servicio de una pandilla violenta y sin tener en cuenta la vida humana, el acusado y sus secuaces de la MS-13 asesinaron a dos personas, intentaron asesinar a una tercera víctima y distribuyeron narcóticos peligrosos», declaró sobre el crimen de Jonathan Hernández, el Fiscal Federal para el Distrito Este de Nueva York, Breon Peace.

«Con la declaración de culpabilidad, esta Oficina y nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley continúan desmantelando a la MS-13, pandillero por pandillero, llevándolos ante la justicia por sus horrendos crímenes y no descansaremos hasta que nuestras comunidades estén a salvo de la violencia de las pandillas», remarcó.

También participaron en el anuncio Michael J. Driscoll, subdirector a Cargo, de la Oficina Federal de Investigaciones, Oficina de Campo de NY (FBI), y Rodney K. Harrison, comisionado de Policía del condado de Suffolk (SCPD). Cuando sea sentenciado, Hernández se enfrenta a una pena máxima de cadena perpetua en prisión.

«Es evidente por estos crímenes incomprensibles que los miembros de la MS-13 no tienen ningún respeto por la vida humana y su violencia no tiene límites», dijo el comisionado Harrison. «Seguiremos trabajando con nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley para diezmar a esta pandilla transnacional y agradezco a los involucrados en este caso por sus incansables esfuerzos para responsabilizar a este individuo por sus atroces acciones».

Cabe indicar que el liderazgo de la MS-13 tiene su sede en El Salvador, Honduras, Guatemala y México, pero la pandilla tiene miles de miembros en todo los Estados Unidos. Con numerosas ramas, o “camarillas”, esta es la organización criminal más violenta de Long Island.

Desde 2003, cientos de miembros de la MS-13, incluidos decenas de líderes, han sido condenados por delitos graves federales en el Distrito Este de Nueva York.