Distrito Escolar de Hempstead espera reemplazar envejecidas aulas «temporales»

Distrito Escolar de Hempstead espera reemplazar envejecidas aulas
Hempstead ha estado utilizando los mismos trailers como aulas temporales durante dos décadas. (Foto: Longislandpress.com)

 

El Distrito Escolar de Hempstead que sufre un bajo rendimiento educativo está aprovechando una oportunidad para finalmente poder sacar a cientos de estudiantes de primaria de remolques (aulas temporales) en los que han estado por más de 20 años y ubicarlos en aulas reales. Pero esto significará que los propietarios deban aceptar pagar entre $ 80 y $ 239 más en impuestos a la propiedad anualmente durante algunos años.

La aprobación por los votantes de un bono de $ 46.8 millones el 15 de mayo permitiría al distrito comenzar un proyecto de capital de tres años para demoler y reemplazar la clausurada Escuela Primaria Marguerite G. Rhodes.

El proyecto abriría aulas reales para 700 y 750 estudiantes en el año escolar 2021, eliminando la mitad de los 55 salones portátiles y aliviando algunas de las condiciones de hacinamiento en las tres escuelas primarias existentes, dijeron funcionarios del distrito.

La superintendente interina de escuelas, Regina Armstrong, califica esta aprobación del bono como «esencial» para cambiar la atmósfera educativa de los niños en un distrito que el año pasado apenas pudo graduar a alrededor del 36.7 por ciento de alumnos del último grado (Clase Senior).

«No es el ambiente de aprendizaje con el que el distrito escolar está de acuerdo», dice Armstrong a través de una portavoz. «Queremos proporcionar el entorno de aprendizaje más óptimo para nuestros estudiantes … el bono es esencial para sacar a los niños de las aulas portátiles donde nunca debieron estar por tanto tiempo. También es crucial para ayudar a aliviar la sobrepoblación (en las otras escuelas primarias) y para detener la monstruosidad en la villa».

El distrito escolar posee aproximadamente la mitad de los trailers que proporcionan aulas para hasta 1,600 estudiantes de primaria en Hempstead, afirma Armstrong. Las otras unidades portátiles son alquiladas por el distrito a un costo de $ 1.5 millones al año.

Se espera que la inscripción de estudiantes en este distrito, de 7,577 en el año escolar 2017-18, aumente dramáticamente en 1,520 para un total de 9,097 alumnos en el 2025. El crecimiento se debe a la afluencia de inmigrantes, según los funcionarios.

Cabe indicar que las escuelas de Hempstead esperan aproximadamente $ 28.7 millones en ayuda estatal para el proyecto capital de $ 46.8 millones en la Escuela Primaria Marguerite G. Rhodes, de los cuales $ 1.4 millones se destinarán para deshacerse de la mitad de las unidades modulares.

Eso dejaría un saldo financiado por los contribuyentes de $ 16 millones, lo que significa un aumento del 1,59 por ciento a los propietarios de viviendas por año.

 

Campaña de Votación

 

La campaña del Distrito Escolar de Hempstead para la aprobación del voto de los bonos es: «Una votación exitosa en mayo de 2018 significa una ocupación en septiembre de 2021».

Armstrong señala que para tener una mejor oportunidad de que pase el voto su objetivo era mantener el impuesto a la propiedad bajo para el presupuesto escolar propuesto para 2018-19.

El presupuesto propuesto de $ 215 millones para el próximo año conlleva un aumento de cero por ciento para los contribuyentes. El presupuesto, la fianza y dos de los asientos de la Junta Escolar serán votados, en la misma boleta el martes 15 de mayo.

Las aulas modulares datan de un momento aún más problemático en la historia del distrito. En 2005, una auditoría de la Contraloría del Estado de Nueva York descubrió que Hempstead gastó $ 2.3 millones para instalar y alquilar salones portátiles. Esto fue parte de $ 5.1 millones en gastos entre 2002 y 2004 que la auditoría denominó «descuidados».

Otros hallazgos de la auditoría incluyeron alrededor de $ 1.3 millones en contratos adjudicados sin ofertas competitivas y alrededor de $ 1.1 millones pagados a agencias de empleo temporal sin aprobaciones apropiadas y sin análisis de la relación costo-efectividad.

Esto, dijeron los auditores, cuando «los edificios de la escuela se derrumbaban, las aulas estaban superpobladas y los estudiantes estaban alojados en espacios inadecuados y temporales para las aulas».

En ese momento, los votantes habían derrotado los últimos dos presupuestos y una propuesta de emisión de bonos de $ 177 millones para reconstruir varias de las escuelas en deterioro. La aprobación de esos bonos habría permitido al distrito construir nuevos edificios escolares, reparar y renovar otros, y eliminar la necesidad de aulas portátiles.

Cuando se le preguntó qué sucederá si el voto de los bonos no se aprueba el próximo 15 de mayo, la superintendente interina de escuelas Regina Armstrong simplemente dijo, «los niños seguirán siendo educados en trailers».

El Departamento de Educación del estado de Nueva York se negó a comentar esta historia.