La campaña del senador de Vermont Bernie Sanders para la nominación presidencial demócrata recibió un gran impulso el sábado en Long Island City, donde la congresista Alexandria Ocasio-Cortez lo respaldó ante una multitud de más de 20,000 personas en Queensbridge Park.
Las estimaciones oficiales de la multitud no estaban disponibles, pero algunos comandantes de la policía dijeron que la reunión «superó las expectativas».
Este fue el rally de regreso de Sanders después de sufrir un ataque al corazón el mes pasado. A pesar de su revés de salud, el senador de Vermont estaba tan vehemente como siempre en una infinidad de problemas como Medicare para todos, gravar a los ricos, matrícula universitaria gratuita y apoyando el plan ambiental de Ocasio-Cortez conocido como el «Nuevo Acuerdo Verde».
“Para decirlo sin rodeos, he vuelto. Estoy más que listo para asumir el cargo de presidente de los Estados Unidos”, anunció Sanders frente a la ruidosa masa de partidarios con carteles.
Ocasio-Cortez, quien trabajó anteriormente como voluntaria para la campaña de Sanders en 2016, aplaudió su consistencia en los problemas sociales que, dijo, impactan a sus electores y «la mayor parte de América». Ella calificó el respaldo como «un momento de claridad».
La congresista del Bronx y Queens contó una letanía de problemas que enfrentan sus electores y personas en todo Estados Unidos, gran parte de los cuales afectaron a su familia durante su crecimiento en la ciudad de Nueva York. También habló sobre lo que llamó «políticas racistas de financiación insuficiente para viviendas de NYCHA». El parque donde se llevó el mitin está cruzando la calle de Queensbridge Houses, un complejo de NYCHA.
«La vivienda pública está sub-financiada por $30 mil millones y eso no es un accidente: es el resultado de un sistema que desvaloriza a los pobres y a la gente trabajadora para priorizar edificios como esos de allá (señalando el horizonte de Manhattan)», dijo.
El senador Sanders, a su vez, prometió un programa de revitalización y reparación «multimillonaria» si es elegido, que corregiría parte de la falta de financiación proporcionada por el gobierno federal.
El cineasta / activista Michael Moore y la alcaldesa de San Juan, Puerto Rico, Carmen Yulin Cruz, también aparecieron en la manifestación para respaldar a Sanders.
Al final de su discurso, a Sanders se le unió en el escenario miembros de su familia, incluida su esposa, la Dra. Jane Sanders y varios nietos.
La mayoría de la multitud prometió apoyarlo con entusiasmo en las primarias.
«Realmente necesitamos a Bernie, y obviamente tenemos que sacar a Trump», dijo Melissa Tolve de Harlem, quien se sentó en el suelo con su amigo, Andrew Gayle. «Confío en él más que en cualquier otra persona que esté corriendo y ha sido consistente. Su plan tiene más sentido: dirigir más dinero a la comunidad y a la atención médica”.
Un pequeño grupo de partidarios de Trump se reunió a las afueras de la manifestación, vocalizando su «disgusto» por Sanders mientras promocionaban a Trump como su salvador.
Partidarios de Sanders intercambiaron palabras con cerca de dos docenas de los seguidores de Trump cuando un grupo de policías de la policía de Nueva York separó a los dos bandos para evitar cualquier altercado físico.
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